Vacunación de la BCG es crucial para la prevención de tuberculosis en niños

En el Dispensario Antituberculoso del Hospital Luis Gómez López han registrado en el último año un aumento en la incidencia de casos de tuberculosis (TBC), en niños mayores de cinco años. Aunque no hay cifras oficiales, es motivo de alarma, por eso los galenos exhortan a las madres a tomar medidas de prevención para evitar los contagios de esta enfermedad causada por una bacteria llamada Mycobacterium bacilo de Koch.

Esta enfermedad se asocia con la pobreza, la desnutrición y el hacinamiento, puede afectar a cualquiera que tenga el sistema inmunológico débil y tenga contacto con un paciente con TBC, por eso es importante que los recién nacidos reciban la vacuna BCG en los primeros 21 días de vida.

La doctora Yolmarys Mendoza, neumonóloga, tisióloga y coordinadora del Programa Salud Respiratoria en Lara, explicó que los niños que se contagian es porque han tenido contacto con sus padres que tienen la enfermedad, pero también pueden tener contacto con pacientes cuando son llevados a algún sitio público.

«La enfermedad se contagia a través de la injerencia de la bacteria, bien sea por estornudo, cuando alguien baila, canta, emite gotitas de saliva que contienen la bacteria, viene una persona sana, la inhala y dependiendo de cómo esté su sistema inmunológico puede presentar la enfermedad… Existe la tuberculosis latente, que es cuando el paciente puede estar infectado, más no enfermo. Y tuberculosis activa, cuando el paciente desarrolla la enfermedad», explicó Mendoza.

tuberculosis 6

La doctora Siriley Maraver, subdirectora del Hospital Luis Gómez López, indicó que además de la vacuna BCG, otra manera de proteger a los niños es con la lactancia materna. Debe evitarse el contacto del bebé con personas que hayan desarrollado tos prolongada.Y cuando superen los seis meses de vida, alimentar con frutas, vegetales y proteínas.

Alerta ante los síntomas de la tuberculosis

«Todo paciente con fiebre más de 15 días, tosedor con expectoraciones (expulsión de mocos) o de sangre, que tenga pérdida de peso, cansancio y sudoración nocturna, hay que sospechar de tuberculosis«, expresa Maraver. En los niños las madres deben estar atentas si lloran frecuentemente y no aumenta de peso. Por eso es tan importante su control con el pediatra. Los niños con TBC son paucibacilares; es decir, es más difícil detectar la enfermedad mediante métodos de laboratorio tradicionales como un esputo, ellos necesitan un vaciamiento gástrico.

tuberculosis 8

En el Dispensario Antituberculoso se garantizan las pruebas de emergencia para pacientes, adultos y niños y el tratamiento gratuito que consiste en aplicar dosis de isoniazida, rifampicina, pirazinamida y etambutol.

«La tuberculosis tiene cura, pero tenemos que evitar los diagnósticos tardíos», subrayó la doctora Yolmarys Mendoza.

tuberculosis 9

Share this article

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *