El Rey Guillermo Alejandro y la Reina Máxima, de los Países Bajos, hicieron un viaje muy especial por Kenia, donde vivieron momentos inolvidables en su visita de Estado de tres días. Más allá de la agenda oficial y los encuentros diplomáticos, la Reina cautivó con cada uno de los atuendos que lució en el país africano, reafirmando su impecable estilo y sofisticación.
Impacto en el recibimiento oficial
En la imagen del recibimiento oficial en la State House de Nairobi, la Reina Máxima de los Países Bajos deslumbra con un imponente vestido rojo con textura bordada en hojas, acompañado de una majestuosa capa fluida que añade un aire regio a su look. Complementa su atuendo con un espectacular sombrero de ala ancha, pendientes llamativos y zapatos a juego, logrando una combinación sofisticada y acorde para la ocasión.
El Rey Guillermo Alejandro apostó por la elegancia clásica con un traje oscuro, camisa blanca y una corbata en amarillo pastel, aportando un toque de luz a su conjunto.
A su lado, el presidente de Kenia, William Ruto, luce un traje azul marino con corbata fucsia, mientras que su esposa, Rachel Ruto, opta por un conjunto tradicional con volantes y estampado en tonos dorados y beige, resaltando la riqueza cultural del país anfitrión.
El marco del encuentro, con las banderas de Kenia y los Países Bajos flanqueando la escena, realza la solemnidad del momento, simbolizando la estrecha relación entre ambas naciones.
Bohemia y chic, Máxima deslumbra en el Lago Naivasha
Para su visita al Lago Naivasha y a la empresa de floricultura Florensis, la Reina Máxima optó por un look relajado pero sofisticado, ideal para la ocasión. Lució un enterizo de manga larga con estampado paisley en tonos tierra, naranja y azul, ceñido a la cintura con un cinturón ancho de rafia que le marcaba la figura. Unos zarcillos XL, un bolso de mano tejido y unas sandalias de plataforma le dieron el toque boho-chic ideal para el paisaje.
Su peinado recogido y su característico maquillaje natural resaltaron la armonía del conjunto.
Por su parte, el Rey Guillermo Alejandro eligió un traje en tono arena, acompañado de una camisa azul celeste y una corbata en un suave color lavanda, una combinación fresca y apropiada para el cálido clima keniano.
Noche de gala con un look sofisticado en Nairobi
Para la cena de gala en el Hotel Marriot, la Reina Máxima apostó por un elegante vestido negro de líneas fluidas con capa integrada, un diseño minimalista que destilaba distinción. Complementó el look con accesorios dorados y un collar llamativo, que aportó un toque moderno a su estilismo. Además, llevó un chal negro en la mano, mostrando versatilidad para adaptarse a la ocasión.
Su melena suelta con ondas suaves y un maquillaje natural potenciaron su belleza sin esfuerzo.
El Rey Guillermo Alejandro se mantuvo fiel a la etiqueta con un clásico esmoquin negro con pajarita, reafirmando su elegancia protocolaria.
A su lado, la Primera Dama de Kenia, Rachel Ruto, destacó con un abrigo de gala negro con bordados dorados en la parte superior, acompañado de un bolso metalizado y tacones a juego. El presidente William Ruto también se sumó al código de vestimenta con un impecable esmoquin negro.
La velada fue el broche de oro de la jornada, donde la moda y la diplomacia se fusionaron en un ambiente de lujo y cortesía.
Máxima se despide de Kenia con tonos sutiles
En su última jornada oficial en Kenia, la Reina Máxima apostó por la delicadeza y la elegancia con un vestido en tonos celestes y blancos, con estampados florales y mangas largas con detalles en encaje. La prenda reflejaba una perfecta mezcla de modernidad y clasicismo, en sintonía con la solemnidad del evento.
Para completar su look, optó por una cartera en tono verde oliva y guantes de cuero negro, creando un contraste sutil pero sofisticado. Un tocado discreto y elegante, en armonía con el vestido, fue el toque final de su característico aire regio.
Este atuendo no solo reafirma su impecable sentido de la moda, sino que también transmite un mensaje de respeto y diplomacia en su visita oficial al International Peace Support Training Centre (IPSTC), donde se discutió la cooperación en defensa entre los Países Bajos y Kenia.
Con cada aparición, Máxima de Holanda volvió a demostrar que su vestimenta es mucho más que una declaración de estilo: es una expresión de su rol como representante de la realeza y embajadora de su país.
Fotos: AFP News
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