El cuerpo de Felipe Falcón fue entregado erróneamente a otra familia y cremado antes de que sus verdaderos parientes pudieran despedirse de él. El cadáver fue sacado de la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda de Barquisimeto por parte de una funeraria y las personas destacaron que en ningún momento verificaron la identidad del fallecido.
La tragedia no terminó con la muerte de Felipe Falcón, su familia, en medio del dolor y los trámites para poder retirar el cadáver, recibió una noticia que los dejó en shock: el cuerpo del señor Felipe no estaba en la morgue.
El personal de morgue luego de buscar por toda la sala patológica no hallaron el cuerpo y fue así como les dijeron que lo habían entregado a otra familia, que incluso lo cremó antes de que su error fuera descubierto. Familiares pudieron confirmar que el cuerpo del fallecido era del señor Felipe, por las cámaras de seguridad que grabaron el proceso en el crematorio.
Las consecuencias del error en la morgue del Hospital Central
«Muere mi papá. Voy del hospital a buscar los papeles para hacer el procedimiento con la funeraria. Mientras estamos en eso, mandan al chofer del carro fúnebre con mi hermano para retirar el cuerpo. Cuando llega, le dicen que el cuerpo de mi papá no está. Que se lo habían llevado otras personas», comentó la hija de Felipe.
Fue así como los familiares comenzaron a hacerse preguntas y le pedían respuestas al personal de la morgue. «Yo llegué y pregunté a los funcionarios cómo era posible entregar un cuerpo sin la debida identificación. ¿Si yo llego con un acta de defunción falsa puedo llevarme a cualquiera?, no puede ser», expresó la joven.
El señor Felipe murió el lunes producto de un fuerte dolor abdominal y pocas horas después sus familiares iniciaron el proceso para darle una despedida. La desesperación de la familia los llevó a exigir respuestas inmediatas. Se supo por los familiares que la Dirección del hospital convocó a una reunión con ellos el lunes 31 de marzo y anunció que se iniciará una investigación.
Pero el dolor de no darle el último adiós al señor Felipe sigue latente en la familia. No hubo velorio ni sepultura, solo las cenizas.
